Salmo 23:4 --- Valle de profunda oscuridad
Salmo 23:4 Aunque pase por el valle de sombra de muerte, no temeré mal alguno, porque tú estás conmigo; tu vara y tu cayado me infunden aliento.
-------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
En el v.
4, David continúa con la metáfora de las ovejas como humanos, poniéndose él
mismo en el lugar de las ovejas al comparar los muchos barrancos oscuros en
Israel, por los que los pastores conducían a sus ovejas para encontrar pastos
verdes, con sus propios tiempos de prueba. Estos barrancos oscuros eran lugares
de escondite comunes para los depredadores. Entre los riscos rocosos y los
rincones oscuros, lobos se encontraban comúnmente buscando una oveja perdida
para cenar. David vio sus propios tiempos de gran prueba—cuando Dios parece estar
tan lejos, comparándolos con esos barrancos oscuros. Aunque el pasaje se ha
interpretado tradicionalmente como el "valle de sombra de muerte",
una traducción más precisa es "valle de profunda oscuridad". La jerga
hebrea se asocia con mayor frecuencia con la oscuridad y la noche en contraste
con la luz o la mañana (cf. Job
3:5; Isa.
9:1; Jer.
13:16; Amós
5:8). En Job
10:21-22, esta oscuridad se asocia con la muerte, pero como ha dicho Robert
Chisolm: "Esta es una aplicación metafórica de la palabra y no refleja su
significado inherente... A nivel metafórico, el v. 4 representa al pastor
llevando a sus ovejas a través de un barranco oscuro donde los depredadores
podrían acechar. Las situaciones que constituyen una amenaza para la vida, las
cuales enfrenta el salmista, son la realidad subyacente detrás de la imagen".
Cuando
David comparó estos barrancos oscuros con los tiempos oscuros de su propia
vida, se dio cuenta de que sus ovejas no tenían nada que temer con él como su
protector. Una vez más, comparó esto con Dios como su propio Pastor. Dice
desafiante: "No temeré mal alguno". La palabra hebrea para
"mal" es común, pero metafóricamente hablando, la palabra se traduce
mejor como "peligro; herida; daño". Los enemigos de David,
quienesquiera que fueran, no representaban ningún peligro para él mientras su
propio Pastor lo cuidara. Se sintió seguro gracias a la presencia de Yahweh,
diciendo: "porque tú estás conmigo". Esta era la naturaleza de la
tarea del pastor, porque siempre estaba con sus ovejas. Su presencia siempre las
reconfortaba.
David
también sintió la protección del Buen Pastor debido a sus herramientas: "tu
vara y tu cayado". Esto también es una comparación con las propias armas y
herramientas de pastoreo de David. La vara tenía aproximadamente dos pies de
largo y se usaba tanto como arma defensiva para golpear a los depredadores,
como para examinar cuidadosamente a las ovejas. Pero los pastores también
llevaban un cayado que tenía forma de gancho en un extremo, el cual se utilizaba
para recuperar ovejas que habían caído en espacios donde el pastor no podía
alcanzarlas. Tanto la vara como el cayado, junto con la presencia del pastor,
consolaba a las ovejas. Para David, él veía a su Dios protegiéndolo con Su
presencia y velando por su mejor interés. David debe haberse sentido poderoso
como pastor experimentado sobre su rebaño de ovejas, pero sabía que Dios era
aún más poderoso con Su protección todopoderosa. Esto "infundía aliento"
a David.
Algo
para reflexionar
Si hoy
estás en "el valle de oscuridad profunda", presta atención; ¡Dios
tiene el control! El valle oscuro es peligroso, tanto espiritual como físicamente.
¿Quizás tu prueba actual en la vida te está causando miedo? ¿Quizás estás
enojado? ¿O tal vez amargura y odio te están abrumando? Aquellos que se han
apoyado en Dios en tiempos de prueba tienen testimonios de paz en medio de su
caos, lo que les hace confiar en Dios como su Pastor y Guía. Este es el tipo de
personas que emergen de ese valle oscuro con un testimonio de la gracia de Dios
que vale la pena escuchar. Habiendo ellos recibido las promesas de Dios,
sabiendo que Su reputación está en juego, su fe puesta a prueba es, como
resultado, más fuerte. Pero para llegar a ese punto, tenemos que confiar
plenamente en nuestro Buen Pastor, creyendo que el lugar donde estamos nos es
dado por Dios no para destruirnos sino para moldearnos. ¿Cuál es tu valle de
profunda oscuridad? Ten la seguridad de que no es demasiado grande para Dios.
Él está allí, y te lleva cargado a través de él al otro lado donde hay luz y
paz. La pregunta es, ¿eres lo suficientemente fiel como para apoyarte en Él y
confiar en Su provisión, permitiéndole cargarte?